Cazando mitos sobre el aceite de oliva virgen extra
El aceite de oliva es un producto sobre el que existen cientos de rumores y prejuicios, algunos de los cuales merecen ser desterrados totalmente de nuestra mente.
De este modo, podremos disfrutar de uno de los mejores alimentos que existen en el mundo.
Primer mito, el color del aceite de oliva:
Debemos ser conscientes de que el color de un aove por si solo no nos indica nada, ya que esto solo varia en función de la cantidad de clorofilas que contiene y estas se pierden con el paso del tiempo, por lo que en todo caso, el color podrÃa servir para identificar los aceites de oliva que están “mas frescos” o ha pasado menos tiempo desde su elaboración.
¿Cómo nos engaña el color de un aceite de oliva?
Sin embargo, esto puede ser engañoso, ya que hay productores que recogen sus aceitunas mucho antes de su punto optimo de maduración, con el fin de obtener un aceite muy verde, el problema es que al recolectar la aceituna antes de que este madura, se pierden muchos de los componentes que dan al aceite de oliva su condición de alimento saludable.
Diferenciar un zumo de aceituna de un aceite refinado
Por ello, a pesar de que el color puede permitirnos intuir la fecha de elaboración de un aceite, debemos fijarnos también es su olor y sobretodo, en su sabor.
Parámetros fundamentales que nos permiten diferenciar a los verdaderos zumos de aceituna, de los productos refinados o almacenados durante años en depósitos industriales.
Segundo mito, la acidez del aceite de oliva
Muchos productores hacen hincapié en el grado de acidez del aceite de oliva como si esto fuera algo relevante para los consumidores, lo cierto es que el grado de acidez hace referencia al estado moléculas del aceite de oliva, lo cual es un parámetro importante para la calidad del producto, pero no es algo que se pueda apreciar en boca, solamente mediante análisis quÃmicos.
¿Realmente importa la acidez del aceite de oliva?
El existe ninguna diferencia en el sabor de un aceite con acidez de 0,1º y el sabor de uno con 0,5º. Esto es debido a que los ácidos grasos libres, que son los que determinan la acidez del aceite, son totalmente insÃpidos.
Para un consumidor conocer el grado de acidez del aceite es totalmente irrelevante, nos basta con conocer el dato de que la acidez máxima permitida para un aceite de oliva virgen extra es de 0,8º.
Tercer mito, freir con aceite de oliva
Uno de los mas extendidos y a su vez, de los mas absurdos.
Mucha gente cree que freÃr con aceite de oliva virgen extra es algo negativo, sin embargo, no podrÃan estar mas equivocados.
A la hora de freÃr cualquier tipo de alimento, debemos ser muy conscientes del tipo de aceite que empleamos, ya que aunque no nos pasemos calentándolo o no reutilicemos el aceite, el alimento que friamos siempre va a acabar absorbiendo una parte del aceite que utilizamos.
Utilizar aceite de oliva para las frituras
Por ello es imprescindible utilizar una grasa que pueda llegar a beneficiar a nuestro organismo.
Al freÃr utilizando aceite de oliva virgen extra, no solo conseguimos que nuestra comida sepa mejor gracias a que absorbe el sabor del aceite, sin que también lo enriquece con algunas de sus propiedades saludables (vitaminas y antioxidantes naturales).
Ademas, el aceite de oliva virgen extra conserva mucho mejor sus propiedades nutricionales que cualquier otro tipo de aceite cuando se utiliza en frituras.
Podéis encontrar mas información sobre este fenómeno en el libro “Aceite de oliva virgen: Nuestro patrimonio alimentario” escrito por el doctor José Mataix, catedratico de FisiologÃa de la Universidad de Granada.
Aceite de oliva vs aceite refinado en frituras
Un pequeño experimento para comprobar el ultimo punto
Puedes hacer una prueba en casa, freÃr 100 gramos de patatas con aceite de oliva virgen extra y otros 100 gramos de patatas con aceite de girasol (o cualquier otro tipo de aceite).
Las patatas fritas hechas con aceite de girasol pesaran más que las hechas en aceite de oliva virgen extra, por lo que gracias al aceite de oliva virgen extra en frituras, no solo añadimos propiedades saludables a nuestra comida, si no que ademas, consumimos menos aceite, reduciendo la ingesta de grasas.